DIATERMOCOAGULACIÓN (DTC)

¿CUÁNDO SE UTILIZA LA DIATERMOCOAGULACIÓN (DTC)?

La diatermocoagulación (DTC) es una técnica muy efectiva que se puede realizar de manera relativamente rápida y cuyos resultados siempre son satisfactorios.

Se utiliza en el tratamiento selectivo de pequeñas lesiones cutáneas: fibromas colgantes, queratosis seborreicas, queratosis actínicas, verrugas filiformes o lesiones vasculares (como angiomas rubí, arañas vasculares), papilomas, condilomas genitales, crestas de gallo, etc. Se pueden tratar lesiones benignas que no requieren extirpación quirúrgica con examen histológico. En el ámbito ginecológico, la diatermocoagulación se utiliza principalmente para la eliminación de los condilomas genitales, también conocidos como "verrugas venéreas" o "verrugas genitales", ya que representan una enfermedad altamente contagiosa transmitida sexualmente. Los condilomas son altamente infecciosos, tanto autoinfecciosos (crecimiento rápido en la zona cercana a la lesión inicial) como heteroinfecciosos, es decir, hacia las parejas con las que hay contacto sexual, incluso sin protección. Los condilomas genitales son lesiones visibles, que aparecen como pequeños crecimientos rugosos, únicos o múltiples, localizados en la piel y/o membranas mucosas de los órganos genitales masculinos y femeninos y en la zona perianal. En las mujeres, pueden manifestarse en el cuello del útero, donde adoptan un aspecto plano (condilomas planos), identificables mediante colposcopia, o en la vagina o vulva, donde se presentan como lesiones verrugosas, a menudo múltiples. En los hombres, los condilomas infectan principalmente el glande, el meato uretral, el frenillo, el tronco del pene y el ano. A menudo son asintomáticos y rara vez causan picazón. En la mayoría de los casos, no causan consecuencias, pero es importante mantenerlos bajo control, ya que el virus del VPH puede causar alteraciones tumorales de las células que pertenecen a la mucosa que recubre el cuello del útero.

CÓMO SE REALIZA LA DIATERMOCOAGULACIÓN

El área a tratar se anestesia mediante infiltración con un anestésico local. El diatermocoagulador (un bisturí eléctrico) genera corriente eléctrica de alta frecuencia que, cuando se aplica al tejido (piel u otro), corta y coagula el propio tejido mediante efecto térmico. Por lo general, puede requerirse de una a tres sesiones.

CONTRAINDICACIONES

No se debe realizar en los siguientes casos: en pacientes con marcapasos u otros dispositivos electrónicos implantados; en pacientes con enfermedades cardíacas graves y/o trastornos de la coagulación; en pacientes sometidos a terapia con anticoagulantes o antiplaquetarios; en pacientes con infecciones cutáneas en curso; en pacientes con enfermedades neoplásicas (tumores) en etapa avanzada; en pacientes con cirrosis hepática; y finalmente, en heridas abiertas en la piel.

QUÉ HACER DESPUÉS DE LA DIATERMOCOAGULACIÓN

Las lesiones deben ser medicadas dos veces al día, siguiendo las indicaciones y usando los medicamentos recetados. En los días siguientes, se formará una costra, seguida de la cicatrización de la quemadura por calor. Con el fin de no comprometer el resultado estético del área tratada, es esencial no exponerla al sol durante al menos tres meses, a menos que se aplique un protector solar de muy alta protección y no mojar la herida hasta que esté completamente curada.

RIESGOS Y COMPLICACIONES DE LA DIATERMOCOAGULACIÓN

Los efectos secundarios que pueden ocurrir son generalmente de poca entidad y tienden a resolverse por sí solos en poco tiempo: aparición de dolor o ardor y la aparición de enrojecimiento en las áreas tratadas, que, salvo complicaciones, se resuelven espontáneamente en unos pocos días. Otras complicaciones, aunque raras: hiperpigmentación o hipopigmentación de las áreas tratadas, aparición de cicatrices queloides.